Suele ser una costumbre en las bodas que la novia lance el ramo a las solteras que hayan asistido a la boda o que se lo entregue a alguien a quien estima muchísimo. También hay novias que deciden conservarlo ellas mismas como recuerdo especial de ese día. Sea como sea, te vamos a dar unas claves para que conserves correctamente el ramo de novia ¡y a disfrutar de bonito recuerdo!
Lo primero que hay que preguntarse es si quieres conservar una parte del ramo o quieres guardarlo entero. Si te decantas por la segunda opción, tendrás que guardarlo en un lugar oscuro boca abajo, pero intenta que el sitio no esté completamente cerrado. Gracias a esta técnica, se le irá toda la humedad a las flores. Una vez esté completamente seco, échale un poco de laca.
Otra forma para conservarlo es usar gel de silice. Este producto te servirá también para secarlo. El proceso es algo distinto a colgarlo boca abajo, ya que en esta ocasión debes coger un recipiente de cristal, hacer una base con este gel , colocar el ramo y luego cubrirlo con más gel.
Pero puede que tu intención no sea guardar el ramo entero, quizá lo que quieres es crear un álbum de recuerdos con las hojas del ramo. Si esto es así, te queda la opción del prensado, esto es, desarmar el ramo hoja por hoja y colocarlas en las páginas de un libro o diario. Eso sí, tendrás que ponerle algo de peso encima al libro para que no se abra con tanta hoja y flor dentro. Esto tardará unos días hasta que todas las hojas estén completamente secas. Entonces podrás sacarlas y pegarlas en un cuadernito o bien hacer un cuadro con ellas para colgarlas en casa.
Y si quieres un resultado más espectacular, mete las flores en el congelador bien cerradas. Una vez pierdatoda su agua, lucirán como el primer día y podrás colocarlas en un jarrón sin temor a que se sequen.
