Deslumbra a todos tus invitados con el vestido de novia perfecto (Segunda parte)

En el primer post que publicamos con algunas indicaciones sobre cómo elegir el vestido de novia perfecto, pudiste descubrir cuál es el traje ideal dependiendo de la estación del año en la que te encuentres y de si la boda se celebra de día o de noche.

Pues bien, hoy queremos darte algunos consejos más para que el día de tu boda estés espectacular, por lo que vamos a centrarnos en algo muy importante: el vestido de novia perfecto para cada tipo de cuerpo.

Así que, si tienes la gran suerte de ser alta y delgada, te quedarán bien prácticamente todos los modelos, aunque los que más te favorecerán serán aquellos que tengan una falda con volumen o tipo tutú, ya que parecerá que tienes más curvas y estarás guapísima. No obstante, si eres pequeña y rellenita, lo más recomendable es que elijas un vestido de novia sin volumen, ya que eso solo te hará parecer más ancha, por lo que lo mejor es que te decantes por telas algo más sueltas que no te queden demasiado ceñidas al cuerpo.

Por otra parte, un dato importante que debes tener en cuenta es que nunca tienes que darle volumen a las partes más anchas de tu cuerpo, es decir, si tienes unas caderas prominentes, no utilices una falda demasiado voluminosa, ya que solo conseguirás que estas parezcan aún más amplias. En estos casos, lo mejor es que optes por faldas más sencillas y emplees accesorios más llamativos en la parte superior de tu cuerpo para que tu figura se vea proporcionada.

Y si te ocurre lo contrario, es decir, tienes unas caderas muy estrechitas y más volumen en el tronco, decántate por vestidos con faldas amplias que aumenten visualmente el tamaño de tus caderas y una parte superior muy sencilla para centrar la atención en la parte inferior del cuerpo y conseguir el vestido de novia perfecto.