Si tuviéramos una abuela que nació y creció en Grecia, sería mejor que crea que arrastraríamos a nuestros amigos y familiares a una boda de ensueño junto al mar. Pero no es tan fácil cuando vives en otro continente, tres vuelos y un viaje en ferry …
Antonia y Jonathan sabían lo significativa (y obviamente hermosa) que puede ser una boda en Ithaca, la ciudad natal de la abuela de Antonia. Rechazaron los planes de boda sudafricanos y decidieron sumergirse en la planificación de bodas en destinos turísticos.
Entonces, ¿cómo se organiza una boda en otro continente tan perfectamente? Creemos, y parece que lo hacen nuestros maridos, que todo se reduce a encontrar el planificador adecuado. Nerviosa por organizar una relación tan distante, Antonia liberó su estrés después de encontrar a la planificadora perfecta, Cleopatra.
Son quizás los elementos más tradicionales de la época los que nos vuelven locos. La ceremonia ortodoxa griega, con las clásicas stefanas (coronas de boda griegas), honró apropiadamente el legado de Antonia y la isla. Sin restarle mérito a la ya hermosa capilla ortodoxa griega, la pareja y el equipo de estilistas decorados con ramas de olivo griegas y adiciones naturales.
Nuestra historia de amor
Jonathan y yo nos conocimos en un café de moda llamado Tasha’s en Johannesburgo, Sudáfrica. Jonathan me vio llegar a almorzar con mi hermano y, sin tratar de parecer un cliché, pensó: «Este es el tipo de chica con la que quiero estar. casar.» Se me acercó, se presentó y me preguntó cuándo podía llevarme a una cita. Le respondí que tenía novio y no me importaba.
Como a Jonathan y a mí nos gusta salir a comer, a menudo nos reuníamos en la casa de Tasha. Un sábado por la tarde, Jonathan estaba almorzando con un grupo de amigos y yo también llegué a almorzar. Envió un enorme ramo de flores a mi mesa donde estaba almorzando, que pensó que era mi madre en ese momento. Todos sus amigos miraron, pero no vine a agradecerle. Lo que él no sabía en ese momento era que yo estaba sentada con la madre de mi amigo, quien exclamó: «¿No sabe que soy su futura suegra?» ¡Jonathan dice felizmente que ella claramente no era mi futura suegra!
Nuestros caminos se cruzaron en la boda de un amigo en común. Después de mucho tequila y más baile, nos besamos y el resto es historia.
Jonathan posó en una colina en Botswana, con vistas a las llanuras. Con el telón de fondo de la puesta de sol más magnífica y nuestras familias mirando, dije que sí.
Calendario
Mi abuela, a quien estoy muy apegado, nació y se crió en la pequeña isla de Ítaca, Grecia. Una vez que nos comprometimos, Jonathan y yo comenzamos a discutir dónde celebrar la boda. La elección obvia parecía ser Franschhoek en Western Cape, Sudáfrica, hogar de algunas de las mejores regiones vinícolas del país. Sin embargo, Jonathan estaba absolutamente convencido de que quería casarse en Ítaca (donde nunca había estado en esta pequeña esmeralda del mar Jónico).
Ithaca está a tres vuelos y un ferry desde Sudáfrica. Entré en pánico pensando en cómo podría planear una boda completa desde otro continente. Luego me encontré con el sitio web de Cleopatra. Vi su video «Conoce a Cleopatra» y rápidamente me di cuenta de que había encontrado a la persona adecuada para planificar el día de nuestros sueños y un amigo de por vida. Mi madre y yo llamamos a Cleopatra y le dimos una indicación de lo que Jonathan y yo queríamos para nuestro matrimonio. Unos días después, Cleopatra envió un presupuesto y nos pusimos en camino.
Cleopatra entendió perfectamente lo que queríamos y nos comunicamos vía Whatsapp y correo electrónico, enviando y devolviendo imágenes de lo que imaginábamos.
flores y estilo
Dado que Ítaca es una isla griega preservada, no queríamos nada demasiado glamoroso que pudiera restar valor a la belleza natural y el increíble paisaje.
Como resultado, optamos por una paleta de verde oliva, crema y blanco para complementar la auténtica belleza de la isla. Nuestras flores consistían en hojas de olivo y varias flores blancas para enfatizar los detalles de la iglesia y elevar las mesas que daban una vista espectacular de Cefalonia y de regreso a Vathy, el pueblo principal de Ítaca.
La carta de colores se amplió a los vestidos de novia y las damas de honor llevaban coronas de olivo en el pelo.
momentos favoritos
Cleopatra proporcionó un hermoso barco de pesca, decorado con un corazón de conchas y cintas blancas, para transportar a los invitados al Lazareto. Mi padre y yo llegamos últimos y tomamos el último barco a Lazzaretto. Teníamos músicos tocando serenatas de amor griegas para nosotros cuando íbamos a la iglesia. El capitán tocó la bocina (tanto que Cleopatra bromeó que se iba a romper), advirtiendo a toda la isla que íbamos camino a la iglesia cuando sonaron las campanas. Fue el momento más maravilloso con mi padre.
la ceremonia
Tuvimos una boda tradicional griega ortodoxa de 45 minutos que es muy simbólica, nuestras coronas de boda (stefana) significan que somos el rey y la reina de nuestra boda. La ceremonia se llevó a cabo en una pequeña isla llamada Lazaret en el medio de Vathy Bay por Papa Theodosios y su querida asistente Louise.
Después de nuestra ceremonia y fotos, Jonathan, nuestro séquito y yo abordamos el barco de pesca y visitamos la isla Lazzaretto, en nuestro camino de regreso al continente de Vathy. Mientras lo hacíamos, los vendedores de sus tiendas (sabiendo que la nieta de Loula volvería a Ítaca para casarse) salieron de sus tiendas, junto con los transeúntes, y nos saludaron con la mano, gritando y aplaudiendo. Realmente fue un momento de boda real.
Fotografía y videografía
Desde que Jonathan y yo elegimos nuestra paleta de colores oliva, crema y blanco, queríamos un fotógrafo que capturara la suavidad y autenticidad de nuestro día. Las fotos de Maxeen son reales, pero suaves y con un tema casi pastel, lo que creemos que es perfecto para capturar la luz del día y la tarde. Maxeen nos hizo sentir muy cómodos y hablamos como si la conociéramos desde hace años. Capturó detalles intrincados y los momentos más mágicos, que ahora están congelados para que Jonathan y yo los disfrutemos.
Shoot Play Love (Nefe Lee y Elia Papadatou) fueron increíbles, capturando los momentos especiales que se pueden olvidar en la emoción del día. A Nefe se le ocurrieron grandes ideas e incorporó nuestra canción elegida en el video de nuestra boda. Quedamos absolutamente impresionados con el adelanto de la boda y el video y lo vimos innumerables veces con nuestros amigos y familiares que no pudieron asistir.
Consejos para otras parejas
Cuando se pruebe el vestido, siéntese con el vestido de novia para asegurarse de que no le quede demasiado apretado. Me sentí tan cómoda con mi vestido y zapatos día y noche, y la única vez que lloré el día de mi boda fue para quitarme el vestido cuando Regresamos al hotel.
No te preocupes por las pequeñas cosas. Había suficiente viento durante nuestra ceremonia de boda y mi velo voló. Pero no dejé que eso me quitara los momentos especiales, y tuve una dama de honor fabulosa que aún se las arregló para agarrar mi velo sutilmente.
Tómese un momento, entre usted y su esposo, para observar el paisaje y las personas que han venido a celebrarlo. Hay mucho que absorber, pero Jonathan y yo definitivamente nos dedicamos a observar lo que sucedía a nuestro alrededor, sonreírnos y dejar que la magia de nuestro día se entrometiera.
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