Luna de Miel en Praga

Prague

Si celebrara mi boda durante este 2013, seguramente incluiría la República Checa entre los posibles destinos para disfrutar de mi viaje de novios, ya que considero que pasar la Luna de Miel en Praga es una opción de lo más romántica debido a que nos hallamos ante una ciudad repleta de encanto.

Y es que, si decides viajar a Praga para gozar de una fantástica Luna de Miel, tendrás la oportunidad de descubrir sus mágicas casas con bajos y rojizos tejados, sus plazas y sus rincones, todos ellos plagados de una gran belleza.

Un enclave que, a mi modo de ver, es ideal para eliminar el estrés acumulado durante la boda debido a que, si te animas a celebrar tu Luna de Miel en Praga, la calma de esta localidad checa te ayudará a olvidarte del frenesí de la elección del vestido de novia, de las alianzas, del menú de bodas y de muchos otros elementos de tu enlace matrimonial. ¡Descubre los enclaves más relevantes de la ciudad!

La Plaza de la Ciudad Vieja

Es el epicentro de Praga y un lugar de gran belleza donde encontrarás multitud de restaurantes y una gran ambientación debido a que siempre está llena de gente.

El Reloj Astronómico

En la misma Plaza de la Ciudad Vieja encontramos el Reloj Astronómico, uno de los monumentos de la región que deberás visitar si decides pasar tu Luna de Miel en Praga no solo por su belleza, sino también por la leyenda que lo rodea, la cual afirma que, una vez que se su construcción tocó a su fin, varios praguenses le arrancaron los ojos a su creador para que no pudiera reproducirlo en ningún otro lugar del mundo. Impactante, ¿no crees?

El Puente de Carlos

Cuando volví de Praga, lo primero que hice fue comprarme un puzle del Puente de Carlos, el monumento más famoso de la ciudad que, para mí, tiene un encanto y una magia más que especial y en el que encontrarás multitud de estatuas a lo largo de sus 500 metros de longitud.